Seguramente estábais ilusionados escogiendo las invitaciones y los detalles de boda más prácticos para los invitados y las mejores ideas originales para bodas. Sin embargo, durante la organización de la boda pueden aparecer situaciones tan excepcionales como la del COVID-19, que os hagan pensar en posponer el enlace durante unos meses. Son situaciones de fuerza mayor y completamente imprevisibles, que precisan de medidas rápidas y, ante todo, de una actitud tranquila y positiva. Podéis descubrir en esta práctica guía los pasos que conviene seguir.
Hablar con los proveedores lo antes posible
Ante la imposibilidad de celebrar la boda a causa del coronavirus, el primer paso que hay que dar es ponerse en contacto con todos los proveedores contratados: fincas o salones, fotógrafos, floristas, pasteleros… En la situación excepcional que estamos viviendo, seguro que todos los profesionales os ayudan en la medida de lo posible y os garantizan una fecha futura. Para estar seguros de cuáles son las políticas de cancelación en cada uno de los casos, consultad bien los contratos para conocer vuestras opciones en cuanto a reembolsos totales o parciales o un cambio de fecha y leed bien la letra pequeña. Lo importante es llegar a un acuerdo lo antes posible y que resulte igual de beneficioso para ambas partes.
Anular o cambiar la fecha en el Registro Civil o en la iglesia
Es otro paso importante que no debéis olvidar. Podéis anular la fecha en el Registro Civil a través de su página web o bien llamar a la iglesia para comunicarlo personalmente. Hablar con el encargado parroquial y llegar a un acuerdo para que el pago abonado sirva para la nueva fecha.
Comunicar el aplazamiento a los invitados
Aunque es posible que muchos de ellos ya se hayan puesto en contacto con vosotros para saber si la boda seguía adelante, es importante que les hagáis llegar un mensaje «oficial» al respecto. ¿Cómo? Si habíais creado una página web, aprovechadla para comunicarles que, debido a la situación actual, el enlace se aplaza durante unos meses. También podéis explicarles que os volveréis a poner en contacto con ellos tan pronto acordéis con los proveedores la nueva fecha para el año en curso. Interesaros asimismo por su situación personal en caso de que tuvieran que desplazarse para acudir a vuestro gran día. ¿Han negociado un reembolso total o parcial del alojamiento? ¿Les podéis ayudar en alguna cosa? Seguro que la solidaridad y el interés por vuestra parte será muy bien recibida.
Otras opciones pasan por enviarles correos electrónicos o bien por llamarles directamente. Seguro que en esta tarea, vuestros padres, hermanos y amigos más cercanos estarán encantados de ayudaros.
Decidir qué hacer con variadas partidas del enlace
Retrasar el paso por el altar por el COVID-19, no implica perder todo lo que ya teníais preparado. Partidas como el vestido de novia 2020, la decoración de la boda, las minutas o el traje de novio 2020 seguirán siendo igualmente válidas. El dilema está en aquellos elementos que tienen la fecha grabada, como las alianzas o los regalos para invitados de boda. En este caso, deberéis decidir si se modifican o se quedan como están ya que, de inicio, esa era «la fecha» de vuestro día B.
Asegurar que la documentación estará en regla
Todo el papeleo que necesitáis para daros el «sí, quiero» tiene una validez de tres meses. Sin embargo, las situaciones excepcionales requieren medidas excepcionales. Así, según publica Moncloa en su página web: «Con el fin de concentrar los recursos del Sector Público en las actividades esenciales para el funcionamiento del Estado, al tiempo que se preserva la integridad y salud de los empleados públicos, se suspenden los términos y se interrumpen los plazos de los procedimientos administrativos en curso, regulados de forma directa o indirectamente por la Ley 39/2015 del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas, hasta que cese el estado de alarma 1«. Así que antes de retomar todos los trámites necesarios, aseguraos en el Registro Civil o en la iglesia correspondiente de que los papeles siguen vigentes.
Revisar el seguro de bodas
¿Sois muy previsores y habíais contratado un seguro de bodas? Si es así, contactad con el agente de seguros para que os informe bien de cuáles son vuestras posibilidades. Por lo general este tipo de situaciones no está contemplada, pero no está de más aseguraros de qué es lo que cubre y si os puede resultar de utilidad en un caso como el actual.
Celebrar el día de todos modos
A pesar de que emociones de todo tipo estarán a flor de piel en una fecha que iba a ser tan importante para vosotros, la ilusión por el gran día sigue estando ahí. Así que celebrarlo de alguna manera. Una cena romántica en casa o ver una película que os recuerde vuestra historia de amor puede ser una excelente manera de hacerlo.
Mantener la calma
Aunque es más que normal que la situación excepcional actual os provoque nervios y tristeza, lo principal es tratar de mantener la calma. Hablar abiertamente de vuestros sentimientos con vuestra pareja y con vuestros seres queridos, y tratad de mantener una actitud positiva ante la situación. La boda no se ha cancelado, sino que se ha pospuesto. Y seguro que encontráis otra fecha en este 2020 o 2021 que también os parece maravillosa.
Aunque tener que aplazar el enlace no es la situación ideal, seguro que todo se soluciona de la mejor manera posible. Sobre todo gracias a la empatía y solidaridad de muchos profesionales del sector, como los salones de boda, fincas, los responsables de las invitaciones de boda, los fotógrafos, los estilistas a quienes habías confiado el peinado de novia… ¡Todos juntos es posible!
Son los mejores, un equipo de profesionales os recomiendo cada detalle es una maravilla.
Muchas gracias, vosotros si que sois los mejores…